“TODOS LOS DÍAS AGRADEZCO EL PODER AYUDAR” – Fundación Las Rosas

 “TODOS LOS DÍAS AGRADEZCO EL PODER AYUDAR”

Su vida ha estado fuertemente ligada a Fundación Las Rosas. Junto al Padre Sergio Correa fue motor central para abrir las puertas del Hogar en Chépica, el primero de la obra en regiones, hace 32 años. “Ha sido un gran esfuerzo, han pasado muchas cosas, pero yo he sido muy feliz aquí”, afirma sin dudar Ibes Cardoen del Real, agricultor y padrino del Hogar Sagrados Corazones de Jesús y María, en la Región de O’Higgins.

Uno de sus recuerdos más dolorosos es el terremoto de 2010, que derrumbó aquel antiguo Hogar. “Fue algo muy fuerte. Dos residentes fallecieron; el resto tuvo que ser trasladado al internado del colegio, hasta que conseguimos fondos con el GORE y pudimos levantar este nuevo edificio, de primer nivel para las personas mayores”, nos cuenta.

Don Ibes se define como un padrino atípico, “intruso”, “preocupado de cuidar la chaucha”. “Para que esto perdure, hay que comprometerse, no solo involucrarse; a veces soy pesado, pero lo hago porque quiero que esto perdure, que no tengamos que llegar al cierre de hogares por falta de recursos y que ojalá se abrieran otros más, para terminar con las listas de espera”.

“Don Sergio me enseñó que ‘Dios no se deja ganar en generosidad’. Con él aprendí que todo lo que uno da, se devuelve con creces, en tranquilidad y felicidad para tu familia. Por eso, no me arrepiento en absoluto y doy todos los días gracias a Dios y a la Virgen por haber podido ayudar y seguir aportando a esta hermosa obra”.